Oaxaca de Juárez, 3 de marzo. No ha dejado de hablar de la marcha rosa el peje durante lo que va de la semana y además amenazando que él va a marchar el 18 en defensa de quién sabe qué. Los analistas piensan que por supuesto está preocupado porque la clase media ha salido y le ha arrebatados las calles, porque nos hemos dado cuenta del peligro que corremos como ciudadanos y porque no le queremos heredar a nuestros hijos, un México con instituciones mutiladas.
El peje sabe perfectamente que la masiva manifestación en contra del Plan “B” que pretende “descuartizar” al Instituto Nacional Electoral (INE), no tuvo como motivación mil pesos, una torta y un refresco y en cambio, si fue una movilización ciudadana, impulsada desde el patriotismo mexicano que abarrotó las plazas más importantes del país. Eso es suficiente para espantar a cualquier aprendiz de tirano.
Por lo mismo, trata de descalificarla y en su inútil intento, casi como su protegida Yasmín Esquivel Mossa, cuando intenta culparnos de “delincuentes”, de “protectores de García Luna”, de “protectores del conservadurismo o del narco”, se hunde más porque cada manifestante que asistió a las 120 ciudades en México y en el extranjero, sabemos a qué fuimos.
El discurso de descalificación hacia los millones que asistimos el 26 de febrero a las plazas públicas del país, también lleva destinatario y, no somos nosotros los que nos manifestamos, sino la masa informe de ignorantes que le siguen creyendo y el narco… Es a ellos a los que dirige esos mensajes para tratar de justificarse él mismo de haber perdido las calles a manos de la conciencia patriótica y, claro que le da miedo por lo que viene.
Sus dislates y bravuconadas, lo hicieron decir en la mañanera que si Tesla quería invertir en México, sería dónde él quisiera y resultó que si va a invertir en México pero donde Samuel García, Gobernador de Nuevo León lo dijo desde un principio y específicamente donde Elon Musk quiere.
Sin duda está preocupado y molesto por la marcha y, porque a pesar de que el 18 de marzo ocupe toda la fuerza del estado, con todo el erario del estado para movilizar a millones, él mismo sabe que no será, como la del 26 de febrero una manifestación genuina, sino una motivada por las dádivas electorales que regala a lo largo y ancho del país.
Pero el erario no le va a alcanzar para llenar las principales plazas públicas de México, ni tampoco podrá acarrear a manifestantes en Nueva York, Londres u otras ciudades del mundo, simplemente porque ahí no llegan sus programas sociales. Sabe perfectamente que la del 18, será una marcha que, de alguna manera lo manchará porque utilizará recursos públicos para demostrar su “fortaleza” si es que le queda alguna.
Tanto los morenos como el propio peje saben a la perfección que una marcha motivada desde el poder, no tiene absolutamente NINGÚN MÉRITO y, sin embargo, gastarán millones de pesos de las arcas estatales y federales para volver a satisfacer el enorme ego del “presidente”, así en minúsculas y entre comillas., pero también para mostrar el tamaño del temor que tiene.
¿Por qué no destina mejor esa carretada de dinero a la compra de medicamentos para los niños con cáncer?, ¿por qué no los utiliza mejor en abrir las estancias infantiles, los comedores comunitarios y todos esos programas que si fomentaban EL DESARROLLO SOCIAL?, ¿por qué no los invierte en combatir la inseguridad que ya lleva casi 148 mil muertes violentas?, ¿por qué no los destina a mejorar los sistemas de salud?… para el peje es más importante sentirse “seguro”, aunque sea con una marcha PAGADA.
Pero no es la ola rosa la que debe preocuparle al peje. La ola rosa solo defiende a las instituciones incluyendo la Presidencia de la República que es una institución. La ola rosa solo es el soporte ciudadano para que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) pueda hacer su trabajo sin presiones del ejecutivo que se cree totalitario y por encima de la Constitución. No es una manifestación en contra de López porque los ciudadanos de la Clase Media de este país, no queremos que se vaya, sino que se quede a rendir cuentas cuando entregue el poder.
Lo que sí le debe preocupar y mucho, es la solicitud de extradición que hizo el Gobierno de Estados Unidos de Ovidio Guzmán el hijo del “Chapo”, presuntamente amigo del peje y le debe preocupar porque con el naco no se pacta, al narco se le combate y, si esas visitas a Badiraguato en lo oscurito llegaron a algún acuerdo para no entregar a sus miembros, entonces la vida del peje y de sus vástagos, no vale más que CUP (peso cubano interno), o sea, nada.
La solicitud de extradición de Ovidio Guzmán, no estaba prevista en el horizonte político del peje y la cuatroté y pensaron que podía quedarse en una cárcel de México -si es que en verdad lo agarraron- pero la solicitud hecha en tiempo y forma, pone en varios aprietos tanto al peje en lo personal, como a su gobierno en lo general.
El crimen organizado y sobre todo el poderosísimo cartel de Sinaloa, NO LE VA A PERDONAR AL PEJE UNA AFRENTA DE ESE TAMAÑO y ellos no juegan con los pactos, por eso no solo la estabilidad del gobierno, sino hasta la vida de la familia López, puede estar en un riesgo mayúsculo. Eso es lo que debe preocuparle fuertemente al peje, por eso la muestra de “poder” qué tratará de hacer el 18 de marzo con recursos públicos.
EL RATÓN, ATRAPADO EN SU PROPIA RATONERA… Al tiempo.
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