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El proceso químico desarrollado por los especialistas utiliza etilenglicol e hidróxido de potasio para destruir las cadenas poliméricas que forman el PET, además el tiempo que se tarde en desintegrar dependerá de las condiciones térmicas.

“Consiste en seccionar el PET en unidades pequeñas y mezclarlo con sustancias como hidróxido de potasio y etilenglicol, que desintegran el plástico”, explicó el doctor Jorge Conde Acevedo.

En entrevista con la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Conde aseguró que los efectos secundarios son menos agresivos comparados con los empleados en la industria, además se hace en un ambiente controlado.

A diferencia de la hidrólisis tradicional que libera sustancias tóxicas al medio ambiente, el nuevo proceso reduce los ambientes de temperatura, mientras utiliza elementos químicos de menor toxicidad, asimismo, el método se puede usar para reciclar el PET.

De acuerdo con Conde, introducir la nueva tecnología podría traer beneficios a las industrias, pues además de mermar el daño al medio ambiente su costo de producción es menor al ordinario.

En la actualidad, los investigadores buscan dar un nuevo uso al producto degradado, el cual pretenden combinarlo con materiales como el cemento para elaborar un elemento de construcción con flexibilidad mecánica en caso de sismos.

El especialista añadió que otra línea de investigación busca analizar el proceso de degradación del PET, así como la introducción de polímeros provenientes de almidones de papa, plátano macho y mango.

En el desarrollo del proceso, que busca favorecer la disminución de acumulación de botellas de PET, trabajan los doctores Jorge Conde Acevedo, Leticia Navarro y el maestro Aurelio Ramírez.