La Crónica
Oaxaca de Juárez, 2 de noviembre. El Presidente entrega los premios a cada uno. Al final de la ceremonia, y después de que uno de ellos se tomara la foto con él, le pregunta:
— ¿En qué estás trabajando?
— En el amaranto.
— Me gusta el amaranto, ponte en contacto conmigo y lo echamos adelante.
En abril de este año, el doctor Manuel Soriano recibió, de manos del presidente Enrique Peña Nieto, el Premio Nacional del Emprendedor por desarrollar productos a base de amaranto con amplios beneficios a la salud, algunos de los cuales incluso han sido aprobados por la Food and Drug Administration (FDA) de EU.
Desde hace siete años, con su empresa Gastronomía Molecular, el investigador del Instituto de Química de la UNAM e integrante de la Academia Mexicana de Ciencias, abordó el tren del emprendimiento tras desarrollar una bebida de amaranto, similar a la leche de vaca pero con propiedades nutricionales mucho mejores.
El químico había obtenido la estructura tridimensional de la proteína del amaranto mediante técnicas de cristalografía de rayos X –la misma técnica empleada por Rosalind Franklin en los años 50 del siglo XX para establecer la estructura del ácido desoxirribonucleico (ADN)–, lo que permitió investigar características de este alimento que han derivado en una docena de productos, que hoy se encuentran en el mercado. Inicialmente, y sin mucho éxito, trató de vincularse con la industria y obtener apoyo dentro de la universidad para desarrollar este proyecto, engavetado por un tiempo. Por lo tanto, decidió emprender.
PRODUCTOS. La bebida desarrollada no tiene colesterol ni lactosa, cuenta con mayor proteína que la leche de vaca, además de contener hierro y el doble de calcio que ésta. Ahora, con su empresa, incluso ha desarrollado cápsulas.
Ha aislado aminoácidos del amaranto para obtener productos antidepresivos y para la concentración, pero incluso ha obtenido otros de tipo cosmético: como una crema que contrarresta la resequedad en la piel, así como padecimientos por psoriasis, y otro más que retarda el crecimiento del vello.
También ha desarrollado un producto que evita la inflamación crónica y puede emplearse para el tratamiento de artritis reumatoide. En total, cuenta con 12 productos, todos a base de amaranto, pero ahora trabaja en la generación de un fármaco que se utilice en el tratamiento del cáncer cérvico uterino.
“Tenemos datos preliminares y en 2015 sacaremos algo muy interesante: encontramos componentes en el amaranto con actividad citotóxica que ataca a las células cancerígenas. En pruebas de laboratorio, en cultivos celulares, hemos logrado matar hasta el 80 por ciento de células de cáncer cérvico uterino”. El próximo año, el equipo del investigador espera avanzar en las investigaciones y realizar pruebas clínicas.
Esta no es la primera experiencia del investigador en materia oncológica, puesto que anteriormente detectó que la bebida de amaranto tenía un efecto benéfico en el tratamiento de niños con leucemia.
“Hemos visto que aumentan su número de plaquetas y contrarrestan un poco el envenenamiento del tratamiento oncológico”. Añade que no saben exactamente por qué ocurre esa reacción, pero sí que hay un efecto benéfico; desafortunadamente en el hospital privado donde realizaron estas pruebas requerían sólo un paliativo y no uno que mantuviera sanos a los pacientes y así redujeran sus visitas a consulta. Muy poco ético, enfatiza el científico, por lo que el producto tendría mejor uso en el sector público.
Por otra parte, el investigador intuye además que podría obtener del amaranto alguna molécula efectiva para tratar el dolor, porque esta semilla “tiene muchas propiedades”. Es una pena, añade, que los mexicanos la hayamos dejado de consumir en nuestra dieta regular después de la Conquista.
METAS. Manuel Soriano es una persona amable y muy sonriente –la alegría del amaranto parece haber quedado impresa en su rostro a lo largo de todos estos años—, y su éxito como empresario, que apenas inicia, no lo aleja de una meta más alta que se ha propuesto.
En menos de una década, dice, demostró que podía emprender y generar ciencia, investigación y productos en beneficio de la sociedad mexicana; ha obtenido premios como el Nacional del Emprendedor, otorgado por la Secretaría de Economía (que además le hizo un reconocimiento por su productividad: 12 productos y 8 patentes); el Premio Heberto Castillo de la ciudad de México; así como el Nacional de Química y el Nacional de Ciencia y Tecnología de Alimentos.
Pero se requiere mucho más para tener un impacto real en la población, reconoce. Por ello, el químico piensa tomarle la palabra al Presidente de la República y referirle una carta donde se lea (más o menos):
“Espero se acuerde de mí presidente, obtuve el Premio (…), entonces me refirió su gusto por el amaranto y me dijo que le gustaría apoyarnos. Por lo tanto, creemos que nuestra bebida sería una buena opción para incluirse dentro de la Cruzada Nacional contra el Hambre…”.
La bebida ya tiene aprobaciones de la Cofepris y la FDA, existe una patente “y todo para que el gobierno pueda incluirla en esta iniciativa”, enfatiza. “Así, los niños se alimentarían con algo muy nutritivo y energético”.
Lograr algo así sería una meta intermedia para el investigador, puesto que tiene un ideal mayor, uno lejos del beneficio personal, el dinero y otras frivolidades, aclara. “Al final de mi carrera quiero crear un laboratorio donde se resuelvan problemas de México, donde además se formen los recursos humanos que continúen esta misión”.
El mexicano vislumbra un escenario en que los desiertos del país se transformen en vergeles, donde trabajen muchos mexicanos en vez de migrar hacia EU. Pero también imagina la creación de soluciones para no sólo producir y exportar materias primas (“eso es ya de otra época”), sino desarrollar productos con valor agregado. “Demostrar muchas más cosas que México puede ofrecer al mundo”. ¿Inasequible? No es posible saberlo; sin embargo lo más importante es saber que un investigador mexicano piensa en grande y además emprende para llevarlo a cabo.
Para más información consultar: http://www.g-molecular.com/