Hermógenes Beltrán García
Oaxaca de Juárez, 14 de septiembre. Una casa inundada del aroma de café por la mañana es tan grata que estimula la estancia de todos, se logra al hervir en una olla el café necesario, con o sin azúcar, panela o piloncillo es un obtener una bebida estimulante de todos los sentidos.
Una bebida exquisita por excelencia es el café pero debe ser de altura, refiriéndose a la del nivel del mar de donde se cultive y beneficie en un rango de 800 a 1,200 metros sobre el nivel del mar no de menor altura pues no obtiene sus propiedades al ciento por ciento, de un sitio con precipitaciones pluviales anuales que den vida a los árboles que a su vez les den sombra bienhechora a las plantas de café, de estos, de los árboles, sobresale el cuajinicuil.
En Oaxaca la denominación de origen del café Pluma se logró tomando de referencia a Pluma Hidalgo en el distrito de Pochutla en la parte montañosa limitando con el distrito de Miahuatlán y de este distrito se distinguen los Pueblos de Ozolotepec y sus aledaños, que poseen la cultura del cultivo y beneficio de café para darnos la delicia aromática de una estimulante bebida.
El café fue introducida a comunidades de los distritos de Miahuatlán, Pochutla y Juquila por Don Basilio Rojas instaurando una pléyade cafetaleros con el filántropo Don Guillermo Rojas pero esa cultura, la del café, las han hecho suya varios municipios y sus comunidades, hoy nos referimos al municipio de Santa María Ozolotepec con sus agencias de Oriente, San Esteban, San Gregorio, San Miguel, San Pablo y Santa Cruz, todos: Ozolotepec que hacen honra al Ocelote que son los tigrillos o más propiamente el jaguar que en pasado fue muy abundante, su piel apreciada para las cubiertas para guarecer los machetes y darles lujo adornando las capulinas, chamarra de piel de venado que en la zona de Miahuatlán le dieron fama a los guerrilleros-guerreros a los “cuerudos” en la batalla del tres de octubre de 1867 en la hoy ciudad de Porfirio Diaz.
Pero regresando al café, en la casa 502 de las calles de José María Pino Suárez o en Pino Suárez 502 del centro histórico de Oaxaca de Juárez expenden esa delicia del paladar, el café molido para que usted lo prepare en casa o ahí lo disfrute, es el café del Maestro Tostador “Coyote” una delicia de cuerpo alto, bajo en acidez, sabor amargo o achocolatado, de un aroma inconfundible si usted quiere disfrutar de una bebida extraordinaria que la proporcionan los cafés que se cultivan y benefician en Oaxaca, destacando las comunidades boscosas de Miahuatlán, Pochutla y Juquila; de Miahuatlán de Santa María Ozolotepec y de ésta, El Coyote, anímese a probar un café que se produce y beneficia en Oaxaca, el auténtico café sin imitaciones ni aditivos.