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México, DF. 23 de septiembre. Quienes lo han vivido, aseguran que dos huracanes nunca son iguales.
Ignacio sufrió en 2001 el paso del huracán “Juliette” y ahora padece las consecuencias de “Odile”.
“En todos los años que llevo en Los Cabos, que yo tengo aquí en Los Cabos, que son 27 años, esta vez fue la más fea, muy muy fea pero no nos queda otra más que unirnos y salir adelante, ¿No? Levantarnos otra vez para que esto vuelva a ser el Cabo que era antes”, indicó Ignacio Rivera, uno de los afectados en Baja California Sur.
Con esa experiencia que le ha dejado la adversidad, familiares y trabajadores comienzan a reconstruir la casa y negocio de estacionamiento de trailes para turistas de Ignacio.
“Echándole ganas así como vemos que le están echando, ¿Cuánto calcula usted de tiempo? Pues para volver a la normalidad yo calculo que mínimo unos 6, 7 meses va a tardar esto para que vuelva a ser como antes, tal vez mas, pero hay que ser positivos porque como puedes ver todo mundo esta trabajando y yo tengo la esperanza de que va a estar en ese tiempo”, confía Ignacio.
Pero es una labor en la que no están solos.
Autoridades también trabajan a marchas forzadas para acelerar la recuperación de los cabeños.
Por su parte, el director de Conagua, David Korenfeld, indicó que “en Los Cabos para el día viernes yo creo que estaríamos hablando de casi la totalidad del caudal anterior hay que dejar el sistema como estaba anterior, pero el 61 por ciento es una cantidad importantísima de agua”.
Y es que así es la vida en donde los huracanes atacan: Después de la tormenta llega la calma y de inmediato la reconstrucción de los daños.