Fernanda Cardoso
Oaxaca de Juárez, 3 de mayo. Luego de que fuera anunciada una tregua en Siria por parte tanto de Rusia como de Estados Unidos, las hostilidades siguen cometiéndose en contra de población civil. Miles son los delitos en contra del Derecho Internacional Humanitario, mismos de los cuales nadie se ha hecho responsable. Tanto Rusia como Estados Unidos junto con el ejército sirio y las milicias se han deslindado de los crímenes en contra de civiles, escuelas y hospitales violando tratados tan importante como el de Ginebra.
Más de cinco años en guerra parecen ser insuficientes para mitigar el daño que ha sufrido Siria con la guerra. Los habitantes de la ciudad de Alepo afirman que pese a los intentos por prolongar la paz, las últimas semanas han sido las más intensas desde hace casi cuatro años que la escalada del conflicto se hubiera acelerado.
En un intento desesperado de la comunidad internacional por mejorar un poco la situación, se acaba de abrir un centro conjunto en Ginebra donde Estados Unidos y Rusia vigilarán las violaciones a la tregua. Naciones Unidas, por su parte ha recibido la noticia con agrado luego de que apoyara en materia de logística para la creación de este centro.
A título personal pienso que con la creación de la coalición occidental y la eventual entrada de Rusia a Siria las cosas se iban a complicar más. Claramente lo que se intenta con este centro es mejorar la coordinación de las principales potencias militares con injerencia en territorio sirio. No obstante, la falta de dicha coordinación prolongó las hostilidades luego de que Rusia y Estados Unidos gastaran la mayor parte de sus energías culpándose mutuamente por violar el alto al fuego.
Si bien el gobierno de Al- Assad poco abona por lograr una paz duradera, hoy en día la situación en Siria se complica luego de que muchos intereses ajenos a este país convergen en una misma conflagración. Por otra parte, otra de las grandes fallas que encuentro dentro de esta mesa de monitoreo es que, como lo mencionara el ministro de exteriores ruso, las negociaciones estarán compuestas por militares rusos y estadounidenses en carácter permanente lo cual, en muchas ocasiones mitiga la calidad de las negociaciones. Aunado a lo anterior, la situación se agrava cuando el frente de guerra en siria está ocupado por bandos indefinidos y para Rusia y Estados Unidos desconocidos.

