Las Vegas, Nevada, 11 de febrero. ¿Estás preparado para disfrutar del Super Bowl 2024? Este evento monumental está a punto de desatar una verdadera oleada de actividad en Las Vegas, ya que se anticipa la llegada de más de 1000 aviones privados, entre ellos el de la cantante Taylor Swift.¿Aún tienes la oportunidad de unirte a esta emocionante experiencia?
El duelo épico entre los Kansas City Chiefs y los San Francisco 49ers en el Allegiant Stadium ha desatado una oleada de tráfico aéreo privado sin precedentes en Las Vegas, elevando tanto el impacto económico como ambiental de esta gran final de la NFL.
Según un estudio de la Cámara de Comercio de Estados Unidos, se estima que el evento inyectará alrededor de 500 millones de dólares en la economía de Las Vegas, atrayendo a unos 150,000 visitantes adicionales para el fin de semana del partido.
En total, se espera que más de 300,000 personas converjan en la ciudad del entretenimiento durante este fin de semana.
Como es habitual durante el Super Bowl, los aeropuertos de la ciudad experimentan un aumento significativo en la llegada de vuelos privados.
Este año, se anticipa cerca de 1000 llegadas solo en Las Vegas, según estimaciones del ‘The New York Times’, respaldadas por datos de la plataforma especializada ‘WingX’.
Datos recopilados por esta plataforma revelan que el año pasado, durante el Super Bowl entre los Chiefs y los Philadelphia Eagles, 562 vuelos privados aterrizaron en Glendale, Arizona, mientras que en el año anterior, durante el evento en Los Ángeles, hubo 752 llegadas registradas.
Este año, los aeropuertos de Las Vegas están lidiando con un tráfico aéreo abrumador, con la gran mayoría de las plazas para jets privados ya agotadas.
Entre las llegadas fue la aparición de la cantante Taylor Swift, quien, a pesar de haber tenido un concierto en Tokio el sábado, llegó a Las Vegas a tiempo para el Super Bowl en su propio jet privado.
Además del sector privado, las aerolíneas comerciales también han aumentado la frecuencia de sus vuelos hacia Las Vegas para satisfacer la creciente demanda, especialmente desde la Bahía de San Francisco y Kansas City.