Comunicado
Ciudad de México, 7 de octubre. Los pintores oaxaqueños Francisco Toledo y Sergio Hernández presentaron una queja formal ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos, CNDH, contra el gobernador de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo por incurrir, junto con otros funcionarios de su administración, en presuntas y diversas violaciones de Derechos Humanos, con motivo de la tenaz oposición de los artistas a un proyecto oficial para construir un Centro de Convenciones y un estacionamiento en una zona protegida de la capital del estado, el Cerro del Fortín. Al mismo tiempo, responsabilizaron al mandatario de cualquier agresión que puedan sufrir.
En el escrito de queja, dirigido al Secretario General de la CNDH, Luis RaúlGonzález Pérez, ambos artistas plásticos -que también emitieron una queja a la CEDH (Defensoría de los Derechos Humanos de Oaxaca) y de la cual no han obtenido respuesta-, establecen los hechos en los que consideran han sido violados sus respectivos derechos a la libre manifestación de las ideas, amenazas contra la integridad física y psicológica, por violaciones a sus derechos de participación ciudadana, por vulnerarse los derechos de los oaxaqueños a un medio ambiente sano y equilibrado, así como por la violación a los derechos culturales de los oaxaqueños.
Junto con muchos otros ciudadanos oaxaqueños, los pintores Toledo y Hernández han demostrado que construir una obra como el CCCO, en un área protegida, no sólo es ilegal, sino un acto de imposición en el que personalmente se empeña el gobernador y su Secretario de Turismo, beneficiario directo de la obra propuesta al ser propietario del hotel más cercano al Cerro de El Fortín.
En su escrito de queja señalan: “A quienes se quejaron y pidieron información, les enviaron un grupo de pandilleros armados con palos para golpearlos. El hecho no sólo es abusivo, inmoral e ilegal, también es delictivo. Desobedecer además la orden dada por un juez para suspender la obra es un desacato y se supone una conducta sancionada por las leyes penales”.
Los quejosos piden a la CNDH intervenga con la finalidad de que se dicten hacia ellos medidas cautelares de protección, “en virtud de ser un problema en donde se encuentran involucrados grupos poderosos de interés tanto gubernamentales como gremiales (CTM) y empresariales (Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles), y darse los hechos en un contexto de constante agresión física y verbal”. Solicitan asimismo a la CNDH, intervenga en solicitud de la conciliación entre los quejosos y las autoridades, mediante un diálogo público que permita atender las raíces del conflicto en beneficio de la sociedad oaxaqueña.