Oaxaca de Juárez, 9 de enero. Ayer les platicaba de la encuesta del Financiero que no se parece por ejemplo a las de Mitofsky que pareciera va a encuestar a las colonias populares donde las dádivas del peje hacen su chamba y le dan ventaja a la flaca corcholata oficial abrumadoramente.
La encuesta del financiero no mide la ventaja de Claudia sobre Xóchitl, lo que mide es lo que la gente piensa sobre el peje en cuanto algunos rubros que de una u otra manera, impactan en los bolsillos de los mexicanos como por ejemplo seguridad y economía. Sin embargo, cualquier estudio demoscópico respecto del actuar del gobierno federal y en especial del peje, tiene repercusión en su candidata, porque ella solo es un instrumento, un títere que repite una y otra vez lo que su jefe vocifera.
Dice la pregunta de financiero ¿cómo calificaría la manera en que el gobierno de López Obrador esta tratando los siguientes aspectos?
Economía: 37% de los encuestados dice que muy bien, 49% dice que MUY MAL. Seguridad Pública, 25% dice que muy bien, 62% dice que MUY MAL. CORRUPCIÓN, 32% dice que muy bien, 45% dice que MUY MAL. Apoyos Sociales, 56% que muy bien, 30% que MUY MAL… en lo único que esta aprobado el peje es en el reparto electorero de los programas sociales.
Economía, seguridad y corrupción son los rubros en que el Gobierno Federal al mando de López Obrador, está reprobado e incluso en el reparto de apoyos sociales en que solo alcanza un 56% de aprobación y en esos cuatro rubros, Claudia Sheinbaum ofrece CONTINUIDAD.
Justo ese es el detalle de la encuesta del financiero y su interpretación nos lleva a deducir que eso, el gobierno federal lo sabe, el peje lo sabe y Claudia también, supongo por tanto que, lo que escribí ayer sobre la estrategia de la infusión de miedo a la sociedad, es correcta y claro que se va a agudizar conforme se acerque el día de la elección.
Las casas encuestadoras podrán decir que sus estudios demoscópicos son confiables, pero lo que nos dice el financiero respecto de la percepción al gobierno del peje, es que no está funcionando, que sus bolsillos cada vez sufren más por inseguridad, mala economía y mucha corrupción, todo lo que el peje dijo que iba a combatir.
Claro que los obradoristas dice que la economía “va bien” y presumen la fortaleza del peso sobre el dólar, pero lo que no dicen es que el super peso de hoy, no se compara con el poder adquisitivo de peso en el sexenio de Enrique Peña Nieto. Un kilo de huevo en 2018 costaba 24 pesos, mientras que el año pasado costaba 54 pesos el kilo.
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Si el dólar tiene el precio que hoy tiene, es porque hay muchos dólares en el mercado del dinero. Si hay muchos tomates en el mercado, el precio baja, con el dólar es lo mismo pero ¿por qué hay tantos dólares en México?, sencillo, las remesas y el lavado de dinero vía el Banco del Bienestar -que es investigado en Estados Unidos por la DEA- aumentaron y eso no es nada bueno para la economía de los exportadores y en general de los mexicanos.
Me parece que el tema de seguridad es el más sensible. Los asesinatos en todo el país, el cobro de piso en toda la cadena productiva; es decir, producción, transporte, suministro y punto de venta, también es generalizado en todo el territorio nacional, con más énfasis en narco estados como el de Guerrero, Veracruz, Estado de México, Chiapas, Sinaloa, Sonora, Oaxaca, y Tamaulipas, de acuerdo a datos del Secretariado Nacional del Sistema de Seguridad Pública (SNSSP).
Y no se diga la corrupción. Esa nunca se barrio de arriba hacia abajo, al contrario, se quedó en el piso de arriba donde despacha la cúpula obradorista. Hijos, hermanos, sobrinos, amigos, afectos de la familia presidencial están embarrados todos ellos de una galopante corrupción y eso lo sabe la ciudadanía, por eso los números de las encuestas del financiero.
Hizo bien el rotativo de no encuestar las preferencias electorales en torno a Xóchitl y Claudia, porque están condicionadas a dádivas electorales, hizo bien en no compararlas porque si la pregunta fuera ¿”continuidad con cambio” -que quien sabe qué sea eso- o “rescate del país”?, quien sabe cómo le iría a la corcholata pejista.
Así que no solo tenemos la posibilidad de rescatar a México de las manos de un loco, también tenemos la responsabilidad de salir a las calles a decirlo y ser multiplicadores del mensaje de que México tiene remedio y se llama Xóchitl Gálvez pero además que ella no representa intereses de ninguno de los partidos coligados, sino la esperanza de un México demócrata, institucional y constitucional.
De nosotros depende, eso si, sin miedo al éxito.
@leyvaguilar
Facebook: Francisco Alejandro Leyva Aguilar
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