Sarai Jiménez
Oaxaca de Juárez, 11 de septiembre. La presidenta de la Fundación Alfredo Harp Helú, María Isabel Grañén Porrúa, informó que la fundación destinó 700 millones de pesos para los programas de reconstrucción en las zonas afectadas por los sismos.
A dos años de los sismos del mes de septiembre que sacudieron la región del Istmo de Tehuantepec, aseguró que la fundación actuó de manera inmediata, además de abrir dos cuentas bancarias para que por cada peso recaudado, la fundación Alfredo Harp Helú y Citibanamex otorgaran otro peso más, con lo cual se duplicaron los donativos para las zonas afectadas.
Dijo que se tuvo acercamiento con autoridades federales, estatales y municipales, para lograr mecanismos administrativos que transparentaran los recursos, por lo que se eligieron inmuebles de uso comunitario que era necesario reconstruir, casas de cultura, bibliotecas, parques, mercados y campos deportivos.
Además, sostuvo que para lograr sus objetivos, se instalaron brigadas de la fundación en las regiones más afectadas como lo fueron: la Mixteca, la Sierra Mixe, y el Istmo de Tehuantepec.
Resaltó que los arquitectos y restauradores de la fundación contactaron a las familias que estaban de acuerdo en reconstruir o restaurar sus viviendas de valor patrimonial o de recuperación de la arquitectura tradicional.
A dos años de la tragedia, Isabel Grañén Porrúa, reconoció que todavía falta un largo recorrido ya que la reconstrucción es a largo plazo, ya que su deseo como familia es mejorar las condiciones de vida de las comunidades de Oaxaca.
Entre los monumentos que se intervinieron, destacó el trabajo realizado en el ex convento, templo y obispado de Santo Domingo Tehuantepec, además de 105 viviendas reconstruidas con valor patrimonial, 8 en alianza con el INAH, 38 intervenidas por arquitectos artesanos, 39 restauradas por el taller de restauración y 20 en proceso.
Respecto a las viviendas tradicionales, explicó que fueron 171, 64 intervenidas con arquitectos artesanos, 1 con el taller de restauración, 8 con Eco constructores, y 98 en alianza con Haciendas del Mundo Maya.
Sobre la reactivación económica, se apoyó la reconstrucción de los mercados Guichivere, de Santo Domingo Tehuantepec, el Jesús Rasgado de Asunción Ixtaltepec y el 5 de septiembre de Juchitán de Zaragoza.
También se colocó mobiliario urbano y en parques de Santo Domingo Tehuantepec y Asunción Ixtaltepec.
La presidenta de la fundación, detalló que se tienen que gastar estos 700 millones de pesos, que vayan a donde se necesita, por lo que el trabajo de la fundación está proyectado a 20 años.
“Esto es un ejercicio de transparencia a un nivel de familia, todo se ha comprobado, también de las tragedias se sacan cosas importantes, para nosotros todo tiene que estar perfectamente ordenado y transparentado”, finalizó.