Eje Central
Caminante no hay camino, se hace camino al andar.
Antonio Machado (1875-1939) Poeta y prosista español.
Oaxaca de Juárez, 5 de octubre. Una buena noticia generada por un grupo que durante lustros fue beligerante contra toda acción de gobierno, impulsada por grupos de radicales de izquierda que mantenían latente la amenaza de convertir al Istmo de Tehuantepec en un polvorín que podría estallar en cualquier momento.
Dirigentes de la Coalición Obrera, Campesina y Estudiantil del Istmo, mejor conocida como Cocei, en Juchitán, Oaxaca, se manifestaron a favor de la instalación de plantas eólicas en la región, siempre que beneficien a los juchitecos.
Y, la responsabilidad social de las empresas es mirar a la comunidad con el fin de mejorar el entorno, por lo que llama la atención de la declaración de los dirigentes de la Cocei al afirmar que no se oponen a la inversión, pero exigen que los proyectos sean transparentes.
Ello, relacionado a las obras de la empresa Eólica del Sur que realiza en Tehuantepec. Las condiciones para dar su aprobación, entre ellas asumir el pago de la electricidad que consumen las comunidades indígenas de Juchitán, construir un parque eólico municipal comunitario con dos aerogeneradores de tres megavatios cada uno, hasta lograr una producción de al menos 25 megavatios.
Desde noviembre pasado, el comité técnico formado por Eólica del Sur, la Secretaría de Energía y más de 20 instituciones efectúa una consulta para decidir si se construye un parque eólico de 132 aerogeneradores y 196 megavatios.
La empresa se comprometió a que si se aprueba la obra pagaría al municipio de Juchitán, que preside el perredista y directivo de la Cocei, Saúl Vicente Vázquez, 27 millones 720 mil pesos por licencia de construcción y cambio de uso de suelo, y una aportación anual de tres millones 800 mil pesos para obras sociales o proyectos productivos una vez que concluya la obra.
Lo relevante de este acuerdo es precisamente que la Cocei, se había convertido en un serio dolor de cabeza para los oaxaqueños, pero especialmente para los gobiernos federales priistas. No tenían, simplemente contacto con ese grupo y desde los años setentas habían generado un clima de violencia con una estela de muertos. Hoy, los puentes se tendieron y una empresa logró generar empleo y beneficios para la comunidad.

