Oaxaca de Juárez, 18 de mayo. El gobernador Alejandro Murat anunció anoche que no habrá regreso a clases y que Oaxaca se queda en “semáforo amarillo”.
Fueron muchas las presiones que ejercieron la Sección 22 de la CNTE, organizaciones sociales, partidos políticos, empresarios y la comunidad en general de que no hay condiciones para terminar el confinamiento.
Aunque en otro video Murat dijo que sería respetuoso de las decisiones que tomaran las autoridades de los 203 municipios del estado que se mantienen libres de contagios por Covid-19, mismos que habían sido catalogados como “municipios de la esperanza” y cuya reapertura estaba contemplada en el Plan de la Nueva Normalidad del Gobierno de México para este 18 de mayo.
En una nota que difundió adnsureste y que fue realizada por la reportera Sarai Jiménez, dimos a conocer que, el presidente de la Junta de Coordinación Política de la 64 legislatura del Congreso Local, Horacio Sosa Villavicencio, militante del mismo partido que el presidente López Obrador, criticó el pronunciamiento del gobernador Murat sobre la apertura de los 203 municipios libres de contagio ya que solo provocó la confusión y el relajamiento de las medidas de prevención entre los oaxaqueños.
De lado priista, el legislador Jorge Villacaña Jiménez, presidente de la Mesa Directiva de la 64 legislatura, precisó que el término “nueva normalidad” le parecía inadecuado, ya que en todo caso sería el regresar a como se vivía antes de la pandemia.
“Para mí es apresurado por como se encuentra la curva de la pandemia, en la ciudad de México hay desfase, en Oaxaca se venció por las medidas de los gobiernos estatal y municipal de permanecer en casa”.
“Hay 200 municipios sin coronavirus, pero quien nos dice que es verdad, no hay pruebas aplicadas y sería riesgoso”, subrayó el priísta.
El diputado local del Partido del Trabajo (PT) César Morales Niño, integrante de la Comisión Permanente de Salud, sostuvo que era irresponsable un regreso a la nueva normalidad.
Recordó que el miércoles pasado había 203 municipios libres de contagio, y ahora ya eran menos de 200 municipios porque están creciendo los casos positivos de covid-19.
La voz de los panista fue a través de la diputada federal Natividad Díaz Jiménez quien aseveró que era “inaudito levantar el aislamiento social sin antes garantizar la salud de los oaxaqueños”.
La también dirigente del Partido Acción Nacional (PAN) en la entidad, aseguró que era ilógico reabrir las actividades cuando se está en el momento más crítico de contagios del virus, luego que las autoridades sostuvieran que el pico se mantendrá hasta el 6 de junio por lo que hay muertes cada día, y de no tomarse en serio la situación los casos positivos aumentarán.
“Si las cifras no disminuyen no se debe bajar la guardia, no se debe jugar con la vida de los oaxaqueños ni tampoco con la de los doctores y enfermeras que cumplen con su convicción de salvar vidas y curarnos, por lo que no se les debe de arriesgar por un capricho del presidente”.
En ese mismo sentido, el presidente estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD) Raymundo Carmona Laredo, consideró el regreso a la nueva normalidad como una decisión criminal e incongruente, que raya en lo irrisorio, ya que se pone en peligro la vida de los oaxaqueños.
Y es que dijo que otra vez Oaxaca es utilizado como un laboratorio por Andrés Manuel López Obrador, por lo que el gobierno estatal no debió de haber aceptado, ya que se tiene el segundo lugar de muertes por coronavirus a nivel nacional.
El líder del partido del sol azteca, adelantó que desde el Congreso local se emitirá un exhorto para pedir al gobierno estatal no acatar esta disposición.
En el ámbito educativo, el secretario de Prensa y Propaganda de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) Wilbert Santiago Valdivieso, advirtió que no existen las condiciones para regresar a las aulas, por lo que sería conveniente analizar culminar el presente ciclo escolar.
Afirmó que no por querer regresar a clases para concluir el ciclo escolar 2019-2020 vaya a registrarse un brote mayor y se genere una situación aun peor.
Por su parte, el delegado de la Sección 59, Ricardo Mosqueda, mostró el respaldo de esta gremial a las indicaciones dadas por los gobiernos federal y estatal.
“Estamos a la espera de las indicaciones de las autoridades educativas para regresar a la nueva normalidad, hasta hoy no hay nada para regresar mañana a las aulas, pero estamos atentos a la coordinación y a la autoridad municipal para poder regresar a las actividades escolares”.
“Nos estamos apoyando en el programa Aprende en Casa las 500 escuelas que atienden a 40 mil alumnos en todo el Estado que conforman la Sección 59”.
El Colectivo Oaxaqueño en Defensa de los Territorios, extendió un llamado enérgico a los gobiernos estatal y federal para que reconsideraran el anuncio de iniciar la nueva normalidad en los municipios y comunidades indígenas, ya que se estaba en plena fase tres de la pandemia de Covid-19, en la que se han incrementado los casos de contagio y esta situación podría extenderse si no se continúa con las medidas preventivas, poniendo en grave riesgo la salud, integridad y vida de los pueblos y comunidades indígenas de Oaxaca.
Esas fueron las voces y muchas otras que hicieron reaccionar al joven mandatario que por primera vez en este sexenio no respalda las instrucciones del presidente porque no hay condiciones y ejerció su autonomía como lo hacen otros gobernadores.
Oaxaca, no tiene los recursos de otras entidades y su sistema de salud es obsoleto, malo y corrupto. En una gran mayoría de las comunidades marcada por el gobierno federal como de la esperanza ni siquiera hay un médico, ni una clínica, nada, sus habitantes están destinados a la pobreza y el olvido.
Sus autoridades han llevado a cabo muchos cierres para impedir que la “enfermedad” llegue a sus comunidades y se han fajado.
AMLO ya lo sabe, porque Murat le informó antes del anuncio. Seguramente el presidente no estará contento con esta decisión, pero ni modo. Hoy, quizás Murat será reprendido y exhibido o quizás será reconocido, eso dependerá del biorritmo del morenista porque no sabemos de qué humor amanezca.