Saraí Jiménez/Darío Nolasco
Oaxaca de Juárez, 7 de febrero. El arzobispo de la arquidiócesis de Antequera Oaxaca, José Luis Chávez Botello, señaló que el Papa Francisco no viene a México a juzgar, viene como peregrino ante la Virgen de Guadalupe, a exhortar, orar y madurar el compromiso de la iglesia católica con el mundo.

“Es palpable el entusiasmo creciente, llega en un contexto de violencia, elecciones, en el año de la misericordia y en el inicio de la Cuaresma , en medio de divisiones que dificultan la fe en muchos católicos, por eso la situación exige reflexionar”, aseguró.
Recordó que ante todo lo que atraviesa este país es necesario despertar, orar y prepararse, para dejar de perder los valores y evitar la corrupción.
“Para no acostumbrarse a la corrupción, injusticias y violencia, esta es una anestesia alimentada desde muchos frentes por lo cual se requiere orar, para mantenerse en el bien, aunque la mayoría vaya por otro camino, por ello se debe intensificar la oración”, recomendó.
Chávez Botello dijo que un momento con mucho simbolismo será el encuentro del Papa con la imagen de la Virgen de Guadalupe a solas, ya que así lo ha solicitado.
Destacó que los últimos Papas han dado muestras de cambios, de cercanía, de sencillez, pero las instituciones sofocan muchas veces estas acciones.
“Dios tiene un plan específico para Oaxaca y el Papa viene a despertar a muchos para que sigan adelante, será de mucho bien para la entidad recoger su mensaje, sobre todo, ahora que se está al inicio del proceso el electoral”, puntualizó.